Vuelta Wolcott Field: El rey del tiempo (etapa 21)
Etapa 21: Versalles – París (CRI), 23,2 kilómetros.
Dificultades destacadas: Ninguna.
Análisis: Y, por supuesto, la Vuelta Wolcott Field termina en los Campos Elíseos parisinos, a los pies del Arco del Triunfo, pero no será un paseo a las orillas del río Sena para los ciclistas. Al contrario: al igual que sucedió en la etapa final del Tour de Francia de 1989 en la que Greg LeMond le arrebató por ocho segundos el maillot amarillo a Laurent Fignon, los ciclistas tendrán que afrontar una segunda y definitiva contrarreloj, de poco más de 23 kilómetros y, como sucedió en el citado año 1989, con salida en Versalles, que decidirá la clasificación definitiva de la primera edición de esta inigualable, legendaria y emocionante ronda ciclista que hemos vivido a lo largo de más de tres semanas en Wolcott Field.
Crónica: PARÍS (FRANCIA) - No me vengáis con vuestros finales con ciclistas paseando por las calles hasta que llega el esprint masivo. Quedaos con vuestras aclamaciones del público, con vuestras copas de champán y con vuestras postales turísticas. La mejor manera de acabar una vuelta ciclista de tres semanas es con una prueba infernal, maravillosa, aterradora, sencilla, traicionera, imposible y perfecta de la voluntad humana: una contrarreloj de 23 kilómetros desde Versalles hasta París.
Cuando, uno a uno, los ciclistas se acercaban a la salida en Versalles, casi se escuchaba a los aficionados tragando saliva. No se trataba de una simple caminata alegre por los suburbios parisinos, no. Se trataba de una contrarreloj demoledora, directa a las muelas, de esas que hacen que un ciclista profesional prefiera dedicarse a practicar gimnasia de mantenimiento.
Ya, seguro que no era mucha distancia, tan sólo 23 míseros kilómetros, pero ¿qué kilómetros? Te arrancaban el pelo del pecho. Si a eso le sumamos una llovizna persistente, un poco de viento y mucho cansancio acumulado en las piernas después de 20 etapas infrahumanas, tenemos una auténtica fiesta del dolor a la antigua usanza.
Simplemente preguntad a Miguel Induráin, el rey del tiempo. Sí, ganó fácilmente en la Plaza de Cervantes, pero hasta él tuvo que apretar los dientes durante todo el camino desde Versalles hasta los Campos Elíseos para acabar otra vez el primero en la etapa. Cuando apareció el último control de tiempo en la línea de meta, estoy bastante seguro de que vi al gigante español dar un pequeño brinco de alegría. La sensación de terminar por fin la Vuelta Wolcott Field es la misma que la de alcanzar el Polo Sur tras meses caminando a pie a menos 55 grados de temperatura, aunque después de más de 100 horas montando en bicicleta te quedes a únicamente 24 segundos de alcanzar el podio (el navarro no pudo enjugar su diferencia de un minuto y cuatro segundos con Bernard Hinault, que fue finalmente tercero en la general).
¿Y qué me decís de Fabian Cancellara? La máquina suiza de contrarreloj, con unas pantorrillas que probablemente podrían triturar nueces, realizó una sublime actuación que hizo que todos tuviéramos que mirar nuestro reloj de pulsera dos veces para creérnoslo. Pero ni siquiera su poderoso motor pudo superar la pura potencia de Induráin, quien no pedalea en su bicicleta, sino que la hipnotiza: cada golpe está medido, cada respiración está calculada. Cuando tienes piernas como las de ese español, no sólo ganas todas las etapas contra el reloj, sino que rompes las almas de tus rivales. A veces, solamente puedes quitarte el sombrero y decir: "Olé".
No, la mejor forma de acabar una carrera tan mítica como la Vuelta Wolcott Field no es con un paseo por las calles parisinas. Es con una prueba de coraje de 23 kilómetros que va de Versalles al Arco del Triunfo, donde los más grandes de todos los tiempos tienen que demostrar su valía y los perdedores descubren cuánto les falta para poder ganar. Esta es una etapa que te deja con la boca abierta, ¿vale?, y no la cambiaría por nada en el mundo.
Porque aquí, a la sombra del palacio en el que los reyes del pasado gobernaron con autoridad absolutista, otro soberano certificó su reinado supremo en este domingo lluvioso, con el tipo de cielo nublado que te hace querer acurrucarte con un libro en lugar de subirte a un misil de fibra de carbono y lanzarte por calles húmedas y sinuosas a velocidades vertiginosas. Eddy Merckx volvió a ceñirse la corona de una gran vuelta. Durante algunos días, Alberto Contador tuvo el valor de desafiar su trono, pero el belga se encargó de recordarnos que sigue siendo el emperador eterno del ciclismo.
Cuando Eddy Merckx, el Caníbal, está presente en una carrera, los demás ciclistas pedalean un poco más rápido por puro terror. Lo que pasa con la leyenda belga es que no se deja intimidar. Ni por las montañas, ni por el clima, ni por los rivales, ni por el ruido de centenares de miles de aficionados que gritan en las cunetas con la esperanza de estar presenciando la historia. Merckx es tan firme como la Torre Eiffel, tan inquebrantable como el Arco del Triunfo. No es un corredor llamativo, es simplemente decisivo. Conoce la competición y la disputa a la perfección.
Durante más de tres semanas, Contador, Hinault, Induráin, Pantani, Coppi, Pogaçar… todos ellos estuvieron también brillantes, ascendiendo desde las profundidades de la extenuación. En cualquier otra carrera, en cualquiera otra semana, ellos podrían haber sido los héroes. Pero este era el año de Merckx, un artista que pinta con el lenguaje de los pedales y los platos, que esculpe con sudor y acero.
Al final, la lluvia amainó, la Torre Eiffel dejó de jugar al escondite a través del velo nublado y el sol se asomó hoy sobre París. De algún modo, esa estampa tuvo cierta justicia poética. La ciudad de las luces había coronado al campeón una vez más. Y en algún lugar, tal vez en el palacio de Versalles, los reyes del pasado susurraban en señal de aprobación. Eddy Merckx ha recuperado su trono. Y al subirse al podio, nos ha recordado a todos que las leyendas nunca se desvanecen, sino que brillan más según transcurre el paso del tiempo.
Porque en el ciclismo, esas leyendas se forjan en el fuego de la competitividad y sus victorias no se miden sólo en segundos, sino también en sus gestas narradas y recordadas.
Por eso, el triunfo de Merckx en esta inolvidable edición de la Vuelta Wolcott Field nunca conocerá el silencio.
Velocidad media de la etapa: 46,79 kilómetros por hora.
TOP 15 DE LA ETAPA
Miguel Induráin - 29:45
Fabian Cancellara - 29:55 (+0:10)
Tony Rominger - 30:00 (+0:15)
Eddy Merckx - 30:05 (+0:20)
Greg LeMond - 30:10 (+0:25)
Jan Ullrich - 30:13 (+0:28)
Chris Froome - 30:15 (+0:30)
Tadej Pogaçar - 30:17 (+0:32)
Primoz Roglic - 30:19 (+0:34)
Remco Evenepoel - 30:20 (+0:35)
Alberto Contador - 30:23 (+0:38)
Bernard Hinault - 30:25 (+0:40)
Laurent Fignon - 30:27 (+0:42)
Stephen Roche - 30:30 (+0:45)
Alex Zülle - 30:33 (+0:48)
CLASIFICACIÓN GENERAL DEFINITIVA
EDDY MERCKX: 105:54:11
Alberto Contador: 105:55:17 (+1:06)
Bernard Hinault: 106:07:22 (+13:11)
Miguel Induráin: 106:07:46 (+13:35)
Marco Pantani: 106:09:21 (+15:10)
Fausto Coppi: 106:14:32 (+20:21)
Tadej Pogaçar: 106:14:35 (+20:24)
Vincenzo Nibali: 106:20:17 (+26:06)
Greg LeMond: 106:25:45 (+31:34)
Richard Virenque: 106:49:58 (+55:47)
Chris Froome: 106:56:53 (+1:02:42)
Sean Kelly: 107:01:10 (+1:06:59)
Lucien Van Impe: 107:02:05 (+1:07:54)
Laurent Fignon: 107:02:52 (+1:08:41)
Alejandro Valverde: 107:03:45 (+1:09:34)
Perico Delgado: 107:06:08 (+1:11:57)
Stephen Roche: 107:23:33 (+1:29:22)
Gino Bartali: 107:24:02 (+1:29:51)
Primoz Roglic: 107:26:12 (+1:32:01)
Jan Ullrich: 107:27:15 (+1:33:04)
Joop Zoetemelk: 107:28:30 (+1:34:19)
Claudio Chiappucci: 107:29:43 (+1:35:32)
Roberto Heras: 107:30:49 (+1:36:38)
Felice Gimondi: 107:34:00 (+1:39:49)
Nairo Quintana: 107:36:09 (+1:41:58)
Laurent Jalabert: 107:37:32 (+1:43:21)
Alex Zülle: 107:42:03 (+1:47:52)
Fabian Cancellara: 107:42:51 (+1:48:40)
Tony Rominger: 107:43:01 (+1:48:50)
Federico Martín Bahamontes: 107:43:21 (+1:49:10)
Raymond Poulidor: 107:50:41 (+1:56:30)
Luis Ocaña: 107:54:04 (+1:59:53)
Chava Jiménez: 107:54:52 (+2:00:41)
Remco Evenepoel: 107:56:10 (+2:01:59)
Jonas Vingegaard: 107:57:38 (+2:03:27)
Rik Van Looy: 108:00:54 (+2:06:43)
Carlos Sastre: 108:02:03 (+2:07:52)
Francesco Moser: 108:03:24 (+2:09:13)
Peter Sagan: 108:15:10 (+2:20:59)
Egan Bernal: 108:17:33 (+2:23:22)
Gianni Bugno: 108:21:08 (+2:26:57)
Mathieu van der Poel: 108:22:50 (+2:28:39)
Roger De Vlaeminck: 108:24:26 (+2:30:15)
Jacques Anquetil: 108:24:56 (+2:30:45)
Tom Boonen: 108:29:07 (+2:34:56)
Wout van Aert: 108:29:13 (+2:35:02)
Alfredo Binda: 108:34:50 (+2:40:39)
Costante Girardengo: 108:42:41 (+2:48:30)
Óscar Freire: 108:56:44 (+3:02:33)
Louison Bobet: 108:59:30 (+3:05:19)
DATOS DESTACADOS
Ganadores de etapa en la Vuelta Wolcott Field: Eddy Merckx (5), Fausto Coppi (3), Marco Pantani (3), Miguel Induráin (2), Tadej Pogaçar (2), Tom Boonen, Fabian Cancellara, Alejandro Valverde, Perico Delgado, Chava Jiménez y Peter Sagan.
Días portando el maillot de líder de la Vuelta Wolcott Field: Eddy Merckx (15), Alberto Contador (4), Tom Boonen y Fabian Cancellara.