Daniel Taylor: "A veces, la gente no quiere escuchar la verdad en el fútbol" (Parte 2)
(Este texto corresponde a la sección de Entrevistas, que, como su propio nombre indica, contiene entrevistas; en este caso, a Daniel Taylor, escritor sénior en The Athletic, exescritor jefe de la sección de fútbol de The Guardian, nombrado mejor periodista de fútbol de medios escritos de Gran Bretaña en los años 2015, 2016, 2017 y 2018 -y segundo en 2020- y también nombrado mejor periodista deportivo de Gran Bretaña en el año 2017)
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(AVISO IMPORTANTE: esta entrevista se realizó antes de que Messi fichara por el PSG y Grealish hiciera lo propio por el Manchester City)
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WOLCOTT FIELD: Una vez le leí que el primer partido al que acudió del Nottingham Forest fue en el año 1981, justo un año después de que el equipo ganara su segunda Copa de Europa consecutiva. Ya es mala suerte, pero, evidentemente, tengo que seguir insistiendo y hablar sobre “el entrenador más telegénico y carismático que jamás haya existido”, es decir, el citado Brian Clough. A veces pienso que no se mide en su justa medida lo que Clough logró con ese Nottingham Forest, que fue ni más ni menos que un milagro en toda regla. ¿Cree que en el fútbol actual se podría repetir la gesta del Nottingham Forest? ¿Considera que hay alguna comparación posible a lo que sucedió con aquel equipo de Clough? ¿Tal vez el Leicester campeón de Liga? ¿Cómo le explicaría a alguien que no ha oído nunca hablar de ese Nottingham Forest lo que logró entre los años 1977 y 1980 aquel equipo entrenado por Clough?
DANIEL TAYLOR: No, no creo que sus hazañas se puedan repetir alguna vez porque, básicamente, Brian Clough cogió al Forest en el puesto decimotercero de la Segunda División y en cinco años le llevó a ganar dos Copas de Europa, el Campeonato de Liga, una Supercopa europea y a jugar tres finales de la Copa de la Liga de las que ganaron dos. Estuvieron 42 partidos consecutivos invictos en la máxima división, lo que fue un récord durante 25 años hasta que el Arsenal de Arsène Wenger, el equipo de Los Invencibles, estuvo invicto durante toda la temporada y se llevó el récord. Hasta la llegada de Clough, el Forest era un club que únicamente había ganado la FA Cup en 1898 y 1959, que simplemente estaba a la deriva, no un gran club, no un lugar emocionante en el que jugar al fútbol. Le dijeron que no aceptara el trabajo. Y no sólo eso, sino que hay que dar también mérito al hecho de que armó un equipo que ganó dos Copas de Europa de forma consecutiva con jugadores de la cantera y futbolistas de una plantilla a la que llevó hasta el extremo para, básicamente, convertirles en campeones de Europa, lo cual es algo que simplemente no volverá a suceder.
La del Leicester, obviamente, fue una historia increíble, pero muchas cosas le fueron favorables. Sucedió en una época en la que el Manchester City y el Manchester United estaban teniendo un bajón. Mientras, el Forest tuvo que superar al Liverpool, que era el rey de Europa, el equipo más fuerte de Europa en los años setenta, una especie de máquina roja, y el Forest tuvo que desplazarlo para convertirse en los campeones de Inglaterra y dos veces de Europa. Ese equipo del Liverpool era épico, estaba en su mejor momento. Esa es la diferencia. Y también que el Forest ganó la Liga en la primera temporada en la que ascendieron, mucha gente tiende a olvidarse de eso, y el Leicester en la segunda temporada tras su ascenso. Creo que el del Leicester es el mayor logro de la era de la Premier League. También supongo que en estos días es más inusual que un equipo alcance la cima, pero el Leicester, si se mira de cerca, ha gastado mucho dinero, mientras que el Forest… A veces la gente cuenta lo de que el Forest contrató a Trevor Francis por un millón de libras, pero en realidad ese año solamente jugó un partido, en la final de la Copa de Europa, porque las reglas de registro de jugadores no se lo permitieron. Desafortunadamente, creo que lo que consiguió el Forest no volverá a suceder.
Foto: Christopher Thomond / The Guardian
WOLCOTT FIELD: Ya como periodista, usted apenas pudo tener relación con Brian Clough, pero, en cambio, sí que tuvo una relación a lo largo de muchos años con otro de los entrenadores más históricos del fútbol británico, Alex Ferguson. De hecho, el propio Ferguson le prohibió acudir a sus ruedas de prensa desde el año 2007 y hasta su retirada de los banquillos seis años después tras la publicación de This is the one, el diario que usted escribió sobre dos temporadas del Manchester United. Sobre sus ruedas de prensa, usted escribió que “a veces, se podía saber cuándo no iba a terminar bien. Esos viernes, cuando nos presentábamos en la antigua sala de prensa del campo de entrenamiento del Manchester United, eran a menudo la parte más emocionante de la semana. Pero siempre existía el riesgo de que el hombre del lado opuesto de la mesa pudiera ver una pregunta como una trampa, tomarla como una afrenta y reaccionar”. Además, sobre el propio Ferguson también escribió que “era duro y tenía el control”, “un actor brillante”, “el hombre más voluble que he conocido -fascinante, muy a menudo-, pero no siempre lo hizo fácil”. “¿Era feroz? Respuesta honesta: peor de lo que puedas imaginar. En serio, mucho peor. Ferguson era notable una vez se ponía en marcha”, se preguntó en ese mismo texto. Ahora que ha pasado ya tiempo para poder hacer un balance mesurado, ¿cómo era Ferguson de cerca? ¿Qué cualidades le convirtieron en uno de los entrenadores más importantes de la historia del fútbol? ¿Era el poder, su necesidad de ser la persona dominante de las situaciones, lo que le llevo a tener tanto éxito? Con Ferguson, como usted escribió, ¿“siempre estaba pasando algo”?
DANIEL TAYLOR: Lo de Fergie es un poco extraño porque ahora cuando miro hacia atrás echo de menos los viejos tiempos porque eran emocionantes todos esos viernes cuando te permitían entrar porque a él le gustaba vetar a la gente, incluyéndome a mí. Nunca sabías lo que esperar, estabas esperando afuera de la puerta y estabas charlando sobre el tipo de humor que tendría ese día. A veces, él estaba de mal humor o de un humor brillante. A veces, cuando ganaban se sentía feliz o también de muy mal humor… Su temperamento cambiaba muy a menudo. No puedo ni describir cómo fue porque nunca he visto a nadie ni siquiera cerca de tener ese tipo de temperamento, con arrebatos que se encendían y se apagaban como con un interruptor. En un minuto estaba bien y en el siguiente minuto estaba… ya sabes. Su apodo era “El secador de pelo” porque literalmente te quemaba las cejas cuando se inclinaba hacia adelante y te gritaba en la cara. La mejor manera de describirlo es todo lo que te imaginas sobre cómo era, pero 100 veces peor. Pero también fue muy inteligente. Nunca lo hizo cuando hubo una conferencia de prensa y las cámaras de televisión estaban encendidas. Solía hacerlo siempre en una pequeña habitación privada donde tenía al periodista de periódicos para él solo. Asimismo, cuando ahora miro hacia atrás encuentro partes que no te gustan y partes que admiras. No puedes pasar por alto el hecho de que estás sentado frente a la grandeza. Básicamente, él era una grandeza genuina con la que hablabas dos veces por semana. Fue un privilegio estar en esa posición. Cuando lo estás haciendo, en ese momento puedes no darte cuenta de lo afortunado que eres. Y ahora, se ha ido y todo parece un poco más soso. Incluso cuando llegó Mourinho, al que compararon con Ferguson. Y con Van Gaal, igual. Van Gaal es un personaje con su gran voz, pero no se siente igual. Es difícil explicarle a alguien lo que solía decir Ferguson y mirar a esa persona de la misma forma en la que miraba Ferguson. Ferguson fue enorme. Estuvo allí durante 27 años, una persona increíble a la que cubrir. No siempre era querido, pero siempre fue interesante.
Foto: Tom Dulat / Getty Images
WOLCOTT FIELD: Esos inicios como reportero en Manchester al final se convirtieron en diecinueve años en The Guardian y The Observer, donde fue escritor jefe de la sección de fútbol antes de aceptar la oferta para ser escritor sénior en The Athletic. Además, usted ha sido nombrado mejor periodista de fútbol de medios escritos de Gran Bretaña en los años 2015, 2016, 2017 y 2018 (y segundo en 2020) y sus trabajos han recibido multitud de premios. Entre otros temas, usted ha escrito sobre racismo y, especialmente, sobre los escándalos sexuales en el fútbol inglés. En uno de sus textos mantiene que el deporte “es un lugar muy furioso”, al tiempo que habla sobre “esta rabia esplenética” que acompaña a los aficionados al fútbol. Según sus palabras, “ningún otro deporte provoca tales torrentes de rabia. Es sólo en el fútbol donde todos parecen completamente furiosos y, para algunos, ese parece ser el modo predeterminado, olvidando quizás que está destinado a ser algo para disfrutar y admirar” y añade que “algunos aficionados de hoy en día, y estoy cada vez más convencido de esto, coreografían su ira, casi como si creyeran que es una medida de devoción”. ¿Considera que esa rabia, esa forma de ser irracional y salvaje de los aficionados al fútbol, hace que los temas sociales derivados del fútbol sean más complicados de desarrollar en el periodismo ya que sus protagonistas, es decir, los propios futbolistas, tienen miedo a la ira irracional de los aficionados? Por ejemplo, ahora hay un grave problema con el racismo en las redes sociales en el fútbol inglés o, más paradójico todavía, apenas se conocen jugadores homosexuales en la historia del fútbol masculino. Asimismo, al respecto de los escándalos sexuales en el fútbol inglés, según los datos de la Policía en marzo de 2018, había 849 víctimas y se habían nombrado 300 sospechosos en una operación que implicaba a 340 clubes, 77 de ellos a nivel profesional. ¿Qué reacción encuentra entre los aficionados al fútbol a sus textos sobre los escándalos sexuales, un tema sobre el que usted ha escrito mucho? ¿Ha cambiado mucho su trabajo a lo largo de estos años debido al cambio de paradigma vivido con la irrupción de Internet y de las redes sociales? ¿Cree que ahora, con las redes sociales, es más fácil o más complicado realizar su trabajo?
DANIEL TAYLOR: Esta pregunta es muy difícil porque, ya sabes, los aficionados al fútbol aprenden a tratar a un club de fútbol como a una familia. Está bien que ellos critiquen a su propia familia porque eso es lo que la gente hace a veces, pero si criticas a esa familia desde fuera, no desde dentro, reaccionan. Sus reacciones a veces te hacen sentir como si le estuvieras diciendo a alguien que su esposa no es atractiva o que el niño está mal educado. La gente se enfada increíblemente incluso cuando les dices la verdad y, a veces, la gente no quiere escuchar la verdad en el fútbol. Se trata de un desafío, sólo tienes que aprender con el tiempo que, lamentablemente, ahora es parte del trabajo. Las redes sociales son una parte enorme de la vida ahora, obviamente una parte también del fútbol y del periodismo futbolístico. Así que no hay mucho que puedas hacer al respecto. Hay momentos en los que sabes lo que se avecina y no puedes cambiar las notificaciones y ves personas que no quieres ver y tienes que cuidar de ti mismo porque sabes que a veces puede ser bastante agotador. Estoy tan cansado de esa ola de ira. Incluso con las cosas más ridículas a veces. No diría que esto fue realmente malo, pero puedo recordar que esta vez en el Europeo fue básicamente porque me decían que no diera una buena opinión a Raheem Sterling. Southgate realmente lo está poniendo, Sterling puede tener un gran torneo… A veces acierto y a veces fallo. No puedo ser demasiado engreído. Miras hacia atrás al final del torneo y piensas que fue una buena decisión porque Southgate lo puso en cada partido. Probablemente, Sterling fue uno de los mejores jugadores del torneo para ser justos, incluso aunque no tuvo una gran final. Y luego miras hacia atrás en los comentarios y en cada comentario había furia de que yo pudiera escribir eso porque la gente dedujo que si yo escribía eso no quería a Jack Grealish en el equipo y en ese momento todos querían a Jack Grealish en el equipo. Muchas de estas personas no tienen rostro ni nombre. Yo pongo mi nombre, mi rostro y el lugar en el que trabajo en mis tuits y me encuentro discutiendo con dibujos animados o con nombres falsos. Es como si no hubiera personas reales. Tengo la política ahora de no responder a nadie que no escriba su nombre real. Sé que probablemente hay muchas personas buenas allí por las que también debes acordarte de que, ya sabes, no deberían ser tratadas de la misma manera, pero a veces tienes que trazar una línea. Debo decir que las redes sociales no ayudan con el racismo, parece que estás en un lugar que causa divisiones y este lugar que vemos en Inglaterra como un agujero ha empeorado y, en ocasiones, quiero arreglarlo. El país podría ser un país más feliz si no fuera por las redes sociales y la forma en que da voz a las personas que promueven la división y esencialmente odian muchas cosas. Es un problema.
La contestación a tu pregunta de los textos sobre el abuso sexual es un poco diferente porque la redacción de esos artículos probablemente suscite el respeto de la gente porque es un tema difícil de abordar. A mucha gente realmente no le gusta hablar porque se trata esencialmente de abuso infantil a futbolistas jóvenes cuando estaban llegando a las academias de clubes como el Manchester City, el Crewe, el Newcastle, el Southampton, el Norwich, el Reading, el Blackpool, el Stoke, etc. La gente se siente incómoda por regla general hablando de este tipo de cosas, así que es un poco diferente porque es un tema difícil. No es una conversación fácil de mantener en cualquier circunstancia.
WOLCOTT FIELD: Su abuelo Tommy tuvo un cine en Kelty, el pequeño pueblo escocés en el que creció su padre y al que usted iba de vacaciones cuando era pequeño. Para terminar y en honor a ese cine Regal, que abrió su abuelo en 1939 y que cerró a mitad de la década de los sesenta, conteste por favor a esta quiniela y diga sus razones:
¿Mejor equipo inglés que ha visto en su vida?
Es muy difícil. Probablemente debería decir el Manchester United que fue derrotado por el Barcelona en la temporada 2008-2009. Ese ha sido el equipo más fuerte del Manchester United con Ronaldo, Tévez y Rooney en ataque, Ferdinand, Vidic, Evra y un medio del campo bastante famoso.
¿Mejor equipo extranjero?
El Barcelona que venció al Manchester United en dos finales de la Copa de Europa. Era un equipo brillante, increíble, con esa especie de triángulo entre Messi, Xavi e Iniesta, Eto’ó, Piqué… Ese fue el equipo más brillante y ensamblado que he visto en mi vida por dominar de la forma en la que lo hizo y jugar de manera integral. Fue increíble.
¿Mejor entrenador de fútbol?
Probablemente tendría que decir Ferguson. También tendría que decir Guardiola, Guardiola es increíble. En cierto modo, sé que está un nivel por debajo, pero me alegró mucho ver a Roberto Mancini ganar el Europeo porque lo cubrí cuando estaba en el Manchester City, fue el primer entrenador en ganar la Premier League para el Manchester City y a veces tiende a ser olvidado, pero fue una parte muy importante en la historia de Manchester City. También me gusta a nivel personal y tenemos muchos recuerdos divertidos en común de la época en la que cubrí al Manchester City.
¿Mejor jugador de fútbol?
Messi. Vi mucho a Ronaldo. Vi a Ronaldo todos los años en el Manchester United. Sigue siendo un gran jugador, pero Messi está en un planeta diferente.
¿Mejor jugador que nadie consideraría como una estrella pero que era determinante en su equipo?
Stan Collymore en el Nottingham Forest. La gente no entiende esto, al menos que lo haya visto. Es el equivalente inglés del brasileño Ronaldo. Nunca había visto a un jugador así, pero la gente no parece ver eso porque él jugaba en el Forest. Fue simplemente increíble. Uno de los jugadores más emocionantes que he visto.
¿Mejor escritor o periodista sobre fútbol?
Es una buena pregunta. Alguien que creo que es un escritor de primera es George Caulkin, que está conmigo en The Athletic. Siempre que leo a George pienso que es un periodista muy sentimental, siempre me hace reír y creo que siempre escribe de una forma divertida. También solía amar a James Lawton, que ya ha fallecido. Era un periodista brillante, muy agradable de estar a su alrededor en la cabina de prensa. Solía llamarlo Jim y Jim básicamente estaba sentado allí y acababa con su trabajo en 20 minutos. Para él era tan natural escribir algo de manera tan brillante y elocuente.
Foto: Twitter Daniel Taylor
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En este texto he utilizado referencias de The Athletic.
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*Esta entrevista, que se realizó en inglés, se ha traducido y editado para su correcta comprensión.
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Podéis poneros en contacto conmigo a través de los comentarios de este texto y en Twitter (WolcottField), Instagram (wolcottfield13) o correo electrónico (abrahamwolcott@gmail.com).
Suelo escribir siempre con música, así que he decidido que voy a poner alguna de las canciones que ha sonado mientras estaba escribiendo el texto. Como, por ejemplo, ésta: